"He sido de las que más he hablado del tema", comenta. "Creo que cualquier operación antidopaje es una buena noticia. Incluso estoy a favor de medidas disuasorias más duras, como sanciones de cuatro años en vez de dos".
Dice esto Martínez, que lleva una década intentando batir, sin conseguirlo, la plusmarca nacional de 800 metros femenina. Se quedó a 22 centésimas hace tres años en los Mundiales de Osaka, cuando llegó tercera tras un vertiginoso sprint, corriendo de menos a más, como solo ella sabe. Hizo 1m 57,62s.
"No cambio mis medallas, que son eternas, por marcas que, al fin y al cabo, te pueden quitar. Tampoco me doparía para estar en 1m 55s o para ser medallista olímpica", aclara.
A las pocas horas de la redada en casa de la palentina, Mayte Martínez y otros 60 atletas -ahora son 350- firmaron un manifiesto apoyando la investigación.
Pero ahora la mediofondista teme que la gente "se quede con los titulares de las noticias antes que con el texto", lo que, considera, golpea de lleno a los atletas y al atletismo.
Manuel Pascua, Manolo Sainz, Eufemiano Fuentes, César Pérez... La colusión entre estos nombres y otros deportistas de postín continúa sembrando de dudas la labor de terceros, de técnicos de ciclistas y corredores, de médicos, de masajistas. El faro de Mayte Martínez se llama Juan Carlos Granado, su entrenador de siempre y ex pareja.
"Juan Carlos siempre lo ha tenido claro", puntualiza. "A pesar de mis handicaps, mis anemias, mis lesiones o mis problemas de salud por el tiroides, él jamás me ha hecho la más mínima insinuación. Yo tampoco", zanja." (MAYTE MARTÍNEZ: "Una operación antidopaje es una buena noticia". El País, 03/01/2011, última)