24.1.14

Nombramientos que dan ‘dividendos’: altos cargos de la Administración ‘ayudan’ a sus antiguos ‘señores’

"La medida parece impecable. El Gobierno el pasado viernes decidía aprobar su 5º plan PIVE. Anunciaba la vicepresidenta, que el Consejo de Ministros aprobaba destinar 175 millones a ayudas en la compra de nuevos vehículos ¡La quinta vez  en sólo dos años que el Gobierno decidía apoyar a este sector! 

Algo que ayuda a las ventas de la industria del automóvil, que crea muchos puestos de trabajo… Teóricamente una medida impecable.
Que la mano derecha no sepa lo que hace la mano izquierda…

Excepto porque hay una nube sobre el asunto. El secretario general de Industria, Luis Valero, personaje clave en esta decisión, lógicamente, fue… desde 1996 el ‘jefazo’ de la ANFAC, siglas que corresponden a Asociación Nacional de Fabricantes de Automóviles y Camiones. Vamos, el presidente de la patronal del sector. 

Es decir, el Consejo de Ministros, a petición de Industria, impulsó el pasado viernes nada menos que el quinto plan de ayudas a un sector en el que quien dirige el asunto mantenía grandes ‘amigos y conocimientos’. Cualquier malpensado podría llegar a conclusiones dañinas. (...)

Bien es verdad que el ‘sorprendente’, si no ‘sospechoso’, nombramiento de Luis Valero para un negociado que tiene relación directa con sus antiguos intereses no es único. Ni mucho menos. Muy parecido es el caso de la Directora General de Seguros, por ejemplo, Flavia Rodríguez Ponga.

 Curiosamente, por cierto, también como su compañero Valero, miembro de una rancia familia que en el franquismo floreció lo suyo, y que es hermana, junto a otros ocho ‘rodriguezpongas’ más, de Estanislao, colaborador de Montoro en Hacienda (nombrado cuando estaba siendo investigado por la Audiencia Nacional en un asunto de sociedades que defraudaban precisamente a Hacienda) y de Blesa en Cajamadrid (lo que le ha costado ser imputado, con sus compañeros del Consejo de Administración de Bankia, por apropiación indebida y fraude).

Inspectora de Hacienda, Flavia Rodríguez Ponga encontró mejor acomodo, desde luego monetario, como directiva de la aseguradora Mutua Madrileña desde el año 2004. Entre otras cosas, como directora de Reaseguros. 

Responsabilidad que no la convirtió, a ojos del Gobierno de Rajoy, en incompatible para su actual cargo como responsable máxima en la Administración de los Seguros y los Fondos de Pensiones, aunque a algunos les pueda sorprender.

Anda ahora Flavia Rodríguez Ponga anunciando reformas en el sector para favorecer los seguros privados, lo que quizás no sorprenda, aunque pueda escandalizar. En concreto, según le dicen a ELPLURAL.COM, estaría preparando medidas para favorecer la transición de los planes de pensiones a las aseguradoras, conforme al plan que ‘parieron’ ‘expertos’ contratados por la patronal del sector, UNESPA.

Como el de ellos, también puede resultar llamativo el caso de Isabel García Tejerina, secretaria general de Agricultura y Alimentación, que ha perfeccionado el asunto éste de la puerta giratoria. Y es que ya ocupó el mismo cargo que ahora durante los gobiernos de Aznar, con el mismo ministro Miguel Arias Cañete, con el que parece que hace buen tándem porque los dos han repetido con Rajoy.

Pero es que entre ser secretaria general de Agricultura y ser secretaria general de Agricultura, y de nuevo sin que a nadie le haya parecido que hubiera razones de incompatibilidad, García Tejerina se pasó a la empresa privada como directora de Planificación Estratégica de Fertiberia, empresa del grupo de Villar Mir (como está viendo el juez Ruz, un hombre por cierto que parece ser un generoso colaborador del PP) ¿Cuántas decisiones toma al cabo de un mes la ‘bi-secretaria general’ de Agricultura que afectan a los negocios de Fertiberia y el señor Villar Mir?

La lista es más larga. Hace unos meses un diputado socialista, por A Coruña, planteaba en el Congreso una pregunta sobre incompatibilidades como éstas o similares, que se referían, además de a alguno de los ya citados, a otros altos cargos de la Adminitración Rajoy. 

Por ejemplo, a Jaime Pérez Renovales, nada menos que subsecretario de la Presidencia, y reelegido consejero de Santander Seguros y Reaseguros a pesar de su cargo en la Administración pública; o a Miguel Temboury Redondo, Subsecretario de Economía y competitividad, viejo colaborador de Ángel Acebes y que entre cargo y cargo en la administración se hizo su cartera de clientes en su propio despacho de abogados; o a Pilar Platero, subsecretaria de Hacienda, socia del señor ministro del ramo en el famoso ‘Montoro y Asociados’ que luego se convirtió en ‘Equipo Económico S.L.’ y de los que tanto se ha hablado a causa de Cemex; o de Iñigo Fernández de Mesa Vargas, secretario general del Tesoro y Política Financiera; o de Gonzalo Jorge Ferré Moltó, secretario general de Infraestructuras…

En fin, toda una larga ristra de altos cargos que trabajaron para empresas privadas y que ahora ocupan cargos con cuyas decisiones pudieran favorecer, o puediera parecer que lo hacen, a aquellas empresas…. y a las que, cualquier malpensado, podría pensar que, cuando de nuevo gire la puerta, podrían regresar."                   (El Plural, 13/01/2014)

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